Daño medioambiental de las mascarillas

El grave peligro que representan las mascarillas desechables para el medio ambiente

Un estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology, llegó a la conclusión de que las mascarillas desechables pueden tardar hasta 450 años en degradarse. Considerando que el número de mascarillas que se ocupa al mes producto de la pandemia asciende a 129 mil, su mal reciclaje podría causar graves daños en el ecosistema.

Una de las consecuencias que ha generado la pandemia del coronavirus, además de los contagios y fallecimientos producidos en todo el mundo, es el aumento en el uso de mascarillas desechables, las cuales al ser mal desechadas, pueden significar un grave peligro para el medio ambiente.

Según estimaciones del Ministerio del Medio Ambiente, solo en nuestro país por día se desechar alrededor de 34 millones de ellas, si se considera que cada chileno ocupa dos mascarillas desechables cada 24 horas.

Su plástico interior no ayuda a su proceso de degradación

Debido a que la función de las mascarillas es muy importante para controlar la pandemia, no se tienen reparos en la materialidad que estas puedan tener. En el caso de las mascarillas desechables, en su mayoría están elaboradas con elementos plásticos, lo que no contribuyen a su rápida degradación.

Se estima que debido a sus componentes, este tipo de cubrebocas al llegar al medio ambiente tiene la capacidad de desaparecer en 450 años, algo que claramente representa un peligro para animales terrestres y marinos, además de la flora que los rodea.

Una de las recomendaciones que han surgido para combatir el problema de las mascarillas desechables, es que las personas puedan adquirir las que son del tipo reutilizable. Incluso, en internet existen tutoriales bastante interactivos que enseñan a cómo elaborar un tapabocas con tela de vestimentas que ya no se usan.

¿Cómo se compara este problema medioambiental con el que ya ocurre con el plástico?

Lo cierto es que, si no se toman los resguardos necesarios para reciclar de forma correcta las mascarillas desechables, el problema del plástico podría aumentar sus consecuencias. Según indica la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su informe Estado del Plástico, al año se fabrican más de 300 millones de toneladas de productos plásticos, de los cuales, la mayoría termina en la naturaleza.

A raíz de este problema, la directo de comercio internacional de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, Pamela Coke-Hamilton, detalló que antes de la aparición de las mascarillas desechables, el problema del plástico ya representaba un gran problema para el mundo. Su mal reciclaje, se configura como una consecuencia más de esta pandemia que tomó por sorpresa al mundo.

La nueva cifra de plástico que se produce al mes con el auge de las mascarillas

desechos de la pandemia

Si la cifra de plástico anual es de 300 millones de toneladas, ahora con la elevada producción de mascarillas desechables el asunto pudo haber cambiado. Según la revista internacional Enviromental Science & Technology, se ha llegado a la conclusión de que al mes se utilizan alrededor de 129 mil millones de cubrebocas, la mayoría desechables y de plástico.

Si se consideran estos resultados y los del estudio «Preventing masks from becoming the next plastic problem» de la Universidad de Princeton y la Universidad del Sur de Dinamarca, el problema asciende a una escala mayor. Aquí, se establece que el problemas de las mascarillas se asemeja ya al de las botellas de plástico, en donde por mes, se generan 43 mil millones de desechos.

El problema asociado al reciclaje de mascarillas

Un elemento complejo asociado al reciclaje de estos elementos de protección personal, es que no pueden ser reciclados de la misma forma que las botellas plásticas. Estas últimas, tienen una cifra de reciclado del 25% del total producido.

La gran diferencia que existe entre botellas y mascarillas, es que no existen guías oficiales de cómo reciclarlas. Lo que es más complejo en este sentido, es que al ser elementos que pueden estar contaminados con el virus del COVID-19, existe también un peligro para los demás al tratar de reutilizarlos.

Es por esto, que las organizaciones medioambientales más importantes han pedido a los gobiernos y ministerios correspondientes, establecer protocolos para reciclar de forma segura las mascarillas desechables, con el objetivo de aportar un granito de arena más al cuidado del medio ambiente.