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¿Está preparado mi hijo para tener un teléfono móvil? Responde «sí» a estas cinco preguntas

¿Tu hijo te ha pedido un teléfono móvil y no sabes si es el momento de comprárselo? Es normal que tengas dudas al respecto, ya que es una decisión que tiene su relevancia. Y como padres no queremos precipitarnos, pero a la vez, queremos ofrecerles lo mejor y lo que necesitan realmente. Entonces, ¿cómo decidir?

Por un lado, hemos de tener en cuenta que, aunque la edad es importante a la hora de tomar esta decisión, no lo es todo. Y es que hay otros factores a  considerar: el nivel de madurez, responsabilidad, la necesidad real del teléfono y el uso que le va a dar, etc.

Así, aunque la decisión es muy personal y será cada familia la que decidirá, hay algunos aspectos que puedes tener en cuenta a la hora de tomar esta decisión; te ofrecemos algunas claves y preguntas que puedes hacerte.

5 preguntas para saber si tu hijo está preparado para tener un móvil

1. ¿Es responsable?

La responsabilidad es una señal de madurez, y es un elemento que debemos tener en cuenta si decidimos comprarle un móvil a nuestro hijo. Así que, pregúntate, ¿tu hijo se responsabiliza de sus cosas? ¿Y de las consecuencias de sus acciones? Algunos ejemplos para saber si tu hijo es responsable son:

  • Se hace cargo de sus deberes escolares y los lleva al día.
  • Tiene sus cosas ordenadas y controladas (por ejemplo, hace su cama, tiene sus cosas del cole o instituto guardadas y sabe dónde están, etc.).
  • Sigue las normas de casa.
  • Respeta a sus compañeros y amigos.
  • Lleva a cabo las tareas del hogar con una actitud positiva.
  • Se responsabiliza de las personas de su entorno familiar; por ejemplo, cuida a sus hermanos, visita a sus abuelos…

2. ¿Es respetuoso con las normas?

El hecho de que tu hijo sea respetuoso con las normas es otra clave para saber si está preparado para tener móvil, ya que el hecho de tener móvil implica que hay unas normas o acuerdos a seguir.

Y con esto no nos referimos a que «siempre acate las normas sin rechistar», sino a que las siga con buena actitud y a que si no está de acuerdo con ellas, pueda dialogarlas y negociarlas con educación.Respetar las normas no implica aceptarlas siempre, sino seguirlas con buena actitud y en caso de no estar de acuerdo con ellas, poder dialogarlas y negociarlas con educación.

3. ¿Lo necesita realmente?

Otro aspecto en el que nos debemos fijar, y que no tiene que ver con la actitud de nuestro hijo sino con sus necesidades, es la necesidad real o no de que tenga un teléfono móvil. ¿Realmente lo necesita? ¿Para qué?

Por ejemplo, lo necesita porque los fines de semana se va con su padre y queremos que esté localizable, o porque empieza a salir con amigos, porque va a un colegio lejos de casa y tiene que coger el transporte público…

Se trata de identificar con él estas necesidades reales de disponer del teléfono móvil, y que éstas vayan más allá de querer hablar con sus amigos por WhatsApp o navegar por las redes sociales (porque esto no son necesidades, sino deseos).

4. ¿Sabe gestionar su tiempo libre?

Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de tomar esta decisión es si nuestro hijo sabe, o no, gestionar su tiempo libre. Es decir, ¿busca cosas que hacer cuando tiene un rato libre? ¿Sabe tolerar, de igual forma, momentos de aburrimiento? ¿Se cansa fácilmente de las cosas? ¿Tiene hobbies?

A través de estas preguntas puedes saber si ahora es un buen momento para tener un móvil, o si puede desarrollar una adicción al mismo (aunque esto también dependerá de otros factores), ya que tenerlo requiere también manejar los ratos libres (con actividades diferentes) y no cerrarse solo a estar mirando el móvil.

5. ¿Sabrá hacer un buen uso del móvil?

La prudencia también es importante a la hora de hacer un buen uso del teléfono móvil. Esto lo podemos saber, por ejemplo, estando a su lado manejando nuestro dispositivo.

Podemos fijarnos en si sabe dónde puede entrar y dónde no, lo qué aceptar y lo que no, en si conoce los peligros de la red y/o pregunta antes de tomar la iniciativa de participar en algo que no conoce, etc. Y si conoce los riesgos y consecuencias que pueden tener determinadas acciones en relación al uso del teléfono móvil, podéis considerar que tal vez es un buen momento para dárselo.