Línea 3 Metro

Aporte sustentable de nueva línea 3 del metro de Santiago

Si algo es cierto es que la tecnología ha traído resultados positivas en cuanto al cuidado y conciencia ambiental.

En Chile este tema ha tenido mucho auge, lo que se ha demostrado en gran medida con la electromovilidad.

Recientemente se inauguró la nueva línea 3 del metro de Santiago, conectando a las comunas de Quilicura y la Reina.

La operación de este nuevo medio de transporte promete una reducción de emisiones contaminantes de unas 211 mil toneladas en el 2019.

Así lo planteó un estudio realizado por el Área de Planificación y Desarrollo del Ministerio de Transportes (MTT).

El propósito de implementar estas nuevas medidas de transporte público es tanto proporcionar una mayor comodidad y mejor tiempo de traslado para los chilenos como reducir las emisiones de contaminación presentes en la capital.

Considerando solo el CO2, la incorporación de esta línea equivaldrá un ahorro de 30.657 vehículos a gasolina o 27.120 a diésel.

Propuestas sustentables en medios de transporte

Pero las propuestas sustentables en medios de transporte público no quedan allí nada más. Según la ministra de Transportes, Gloria Hutt, ya se está trabajando en la incorporación de buses eléctricos y ecológicos en nivel nacional.

De hecho, la proyección es que al menos un tercio de la energía consumida en Chile esté destinada al transporte, considerando que reflejan el 20% de las emisiones de CO2.

Tanto la gran presencia de electromovilidad y la apertura de las nuevas líneas (altamente tecnológicas) del metro están cambiando los paradigmas de transporte público.

“Estamos fomentando un servicio limpio, sostenible y altamente valorado por las personas” explica Hutt.

El propósito es sacar provecho del uso de las nuevas tecnologías para permitir el desarrollo de una ciudad más sustentable y limpia en línea con los tratados a los que está suscrito Chile.

Hoy en día es válido decir que la Región Metropolitana cuenta con 200 buses eléctricos, aunque la meta es que el 100% del transporte público sea netamente sustentable para el año 2040.

Análisis de los impactos

Se consideraron los contaminantes más perjudiciales para la salud y el bienestar de las personas: PM10, PM2.5, NOx, HC, CO y CO2 (responsable del cambio climático).

Los que destacan como los más peligrosos son el PM10, PM 2.5 y NOx posibles de causar efectos severos en la salud.

Incluso, para el año de 1996 se declaró a la Región Metropolitana como “Zona Saturada por Ozono” y área de latencia para los óxidos de nitrógeno.

La reducción de emisiones y consumo de combustible generada por la apertura de la Línea 3 del metro corresponde a la disminución del nivel de demanda de viajes en motorizados de superficie (buses, automóviles, motos, taxis y colectivos).

Ahora, gran parte de la población que antes no tenía acceso o buena conectividad del transporte público está haciendo uso de la nueva línea y ha dejado de lado sus antiguas medidas de transporte.

Cabe destacar un factor clave dentro de esta dinámica: el traspaso de usuarios de automóviles particulares a este nuevo servicio.

Con menor cantidad de kilómetros recorridos, se ajusta la oferta de buses en aquellos servicios que compiten con la ruta del metro.